Todos los excesos son malos.
El alcohol en exceso te crea una dependencia (el alcoholismo), y más que una adicción, es una enfermedad mental, en la que tu cuerpo y tu mente cree necesitar del alcohol para funcionar, cuando es totalmente al contrario.
La mariguana es más benigna a la hora de las adicciones. Es una droga psicológicamente adictiva. Esto es que las dosis no te hacen dependiente, sino que tu mente crea la dependencia. Lo malo, que la mariguana es una droga de inicio, y los que buscan sensaciones cada vez más fuertes, se meten con drogas más fuertes, hasta caer en las drogas sintéticas.
La cocaína y los alcaloides sintéticos, en su mayoría, son fisiológicamente adictivas. Tu cuerpo las demanda para su funcionamiento, y con 2 o 3 dosis que te metas, con esas ya son suficientes para crearte una adicción.
Ya, fuera del cotorreo de la dinámica del juego, hay qué moderarse en el uso de las drogas. Si las van a usar, que no se apendejen y las usen con moderación. Y NO SE METAN CON DROGAS SINTÉTICAS. Esas pudren el cerebro completamente y muchas veces quedas en el viaje.